AMORE

La fusión entre lo trash, lo elegante, lo artesanal y lo auténtico fue el punto de partida para redefinir la imagen de este local gastronómico. El proyecto pone en primer plano lo afectivo: transmitir una atmósfera acogedora, donde la amistad, la buena comida y la experiencia del encuentro se vivan de forma natural.
Una cocina abierta funciona como corazón del espacio, permitiendo que el proceso de elaboración sea visible para todos. Observar al maestro pizzero en acción no solo enriquece la experiencia, sino que también genera confianza, transparencia y conexión con el oficio.
El salón fue concebido como un espacio versátil, capaz de adaptarse a diferentes configuraciones: desde grandes grupos hasta encuentros más íntimos. La elección del mobiliario y la iluminación fue clave para garantizar esa flexibilidad sin perder calidez.
El street art, el fútbol, la música y una paleta estética que mezcla lo urbano con lo refinado, construyen una identidad única, alejada de cualquier fórmula tradicional. Un espacio con carácter propio, que invita a quedarse y compartir